domingo, 13 de marzo de 2011

Morir matando: Goal Fiction 4 - Zenerbahçe 9.

Hola Goalfistas. Y golfos (sí, va por tí). Bienvenidos a una nueva crónica, una semana más, semana tras semana; de las aventuras del equipo de moda; otras épicas y quijotescas hazañas, que este capítulo Cervantes hubiera titulado: "De como la victoria no siempre señala al vencedor". Esta semana, jugábamos contra el máximo rival y vigente campeón, el equipo del "Capi", y como siempre el equipo respondió a la altura de tan gran cita. Hay que estar, cuando la épica llama a tu puerta.

Celebrando la vuelta de nuestro Robben, nuestro jugador de cristal, el maldito de las lesiones, Manu, el equipo decidió afrontar el partido sin más recurso que sus propios hombres. Esta vez no aparecería Gandalf, al amanecer del 5º día, para sacarnos las castañas del fuego en el abismo de Helm. No habría mas de los que somos, ni éramos mas de los que estábamos. Seríamos nosotros contra los mejores, de tú a tú.
Sin embargo, en nuestro duelo con el ego, nuestro examen con la fama, empezamos como siempre. Cómo nunca se espera, aunque siempre pase. Planteamos buen partido, plantando cara, pero el rival hirió primero; demostró el nivel con 3 goles que entraron como Napoleón por el arco del triunfo. Entonces fue cuando el equipo decidió que debía estar a la altura del reto. Con ganas renovadas, rezando porque aún no fuera demasiado tarde, Sanju robó un balón en el córner, salvo la posición y metió el balón que metía al equipo en el partido. Dicho y hecho, siguiente posesión, un pase de Sanju al demarque de Manu, que ve la incorporación de Ignacio, y como si de la pizarra se tratase, ve a la perfección el pase de la muerte, et voilà! Jugada de tiralíneas para que Manu estrenase su dorsal y su actuación por la puerta grande.
Tras esto, 3-2 al descanso; y sobretodo, ilusión y esperanza. Esperanza, porque el rival era la peor versión del mejor, sin recambios y con alguna baja, la perfecta víctima. Esperanza porque el equipo jugaba, porque el gol estaba ahí y sabíamos que íbamos a marcar más. Esperanza porque sabemos lo que es jugar por sentir; y ser, como el Atleti o el Racing, capaces de perder siempre, contra todos, y luego ganar cuando nadie podría ni se lo esperaría. Esperanza de llegar a ser el Tumbagigantes.
Pero a la vuelta del descanso, el rival tiró de galones, no iban a dejar que unos niños se les subieran a las barbas. Otros 3 goles y tierra de por medio. Pero el equipo jugaba, y ante todo, no se iba a rendir. Seijo tuvo sus mejores minutos, viendo y distribuyendo el juego mejor de lo que se le podría pedir, Ignacio impecable en defensa, y Nacho y Manu cumpliendo su labor fundamental impecablemente. Y ante todo, la batalla en la banda era nuestra; con Santos de público y nuevas fans de nuestros jugadores, Sólo era cuestión de tiempo.
Y entonces estuvo Sanju, a la altura de la expectativa, materializando las ganas de todo el equipo y tirando del carro cuando el destino le llamaba.
Dos jugadas estando donde había que estar, y 2 goles que suponían soñar con la gloria y aspirar a la grandeza. Individualmente, hat trick y pichichi indiscutible con actuación estelar, siempre por detrás del eterno salvador Guedes. Pero lo importante, 6-4 y al borde del abismo, de tú a tú contra el gran rival. Y el "Capi" viéndolo desde la banda.
Pero, ahí se quedó todo. El equipo enfurecido tuvo que demostrar porque piensan volver a ganar, y porque no pueden permitir que un novato les plante cara de esa manera. 3 goles más, cerrando el marcador, matando el partido y asegurándose de que no nos quedaran fuerzas ni tiempo para volver a meterles el miedo en el cuerpo. David fue aplastado por Goliath, pero por lo menos siempre quedará la cicatriz que le hemos dejado al gigante.



Épica, f: Conjunto de hechos gloriosos dignos de ser cantados en una epopeya.

1 comentario:

  1. Me alegra que el equipo tuviera una tan buena actuacion en una fecha tan señalada... hay que luchar asta la muerte el dia de Chuck

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